lunes, 11 de enero de 2010

DOCUMENTAL DE CANAL SEIS DE JULIO

Que se haga la luz, documental de Canal Seis de julio acerca del conflicto del SME y la privatización de la energía eléctrica en México, es un esfuerzo para proporcionar información que las televisoras y el gobierno federal han omitido o tergiversado, en un afán de lesionar lo más posible al pueblo trabajador, no sólo quitándole su forma de sustento, sino también por la vía de sustraerle los bienes que pertenecen a la nación, como es el caso de la energía eléctrica, y mediante la satanización política y mediática de los sindicatos y los logros contractuales.
El documental hace frente al principal argumento del gobierno de PAN, acerca de que es el SME la causa principal del quebranto de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro, y se exhiben datos de los "favores" del gobierno federal para la iniciativa privada e instituciones gubernamentales, incluida la residencia presidencial de Los Pinos, todos excusados de pagar sus recibos de consumo, mientras que al pueblo trabajador se le hace pagar a gran costo un servicio que empeora con el paso del tiempo.
Se hace el recuento de las compañías transnacionales que son las principales beneficiarias de la privatización de la industria eléctrica mexicana, de la apresurada instalación de la fibra óptica a cargo de compañías propiedad de dos ex-secretarios panistas, así como de las protestas en varias partes del país por mal servicio y costos excesivos de la CFE.
También se incluyen reflexiones sobre el tema realizadas por el escritor Carlos Montemayor y se entregan dos mensajes de solidaridad con los trabajadores electricistas del SME, del escritor Paco Ignacio Taibo y de monseñor Samuel Ruiz, respectivamente.

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ADOPTAR NIÑOS

10-Enero-2010
Carlos Manuel Valdés
Con motivo del planteamiento legislativo sobre parejas homosexuales y adopción de niños me parece que debo tratar un asunto, espinoso para muchos, que se ha enfocando desde ángulos estrechos. El tema es tabú y lo enfrentaré tras el regaño de personas a quienes disgustó mi artículo anterior. No tocaré lo que se discute en la Ciudad de México.
En la televisión alguien dijo que hay 28 mil niños en la república mexicana en espera de padres adoptivos: me parece que debe haber más. Ahora lidiamos sobre la inconveniencia de que algunas parejas adopten niños. Un hombre soltero, viejo, feo y mal hablado, apodado Chinchachoma, recogió alrededor de 300 niños en las alcantarillas y portales del Distrito Federal sin pedir permiso a nadie. Gracias a su corazón un tanto anarquista esos niños tuvieron mil oportunidades que nuestros gobernantes les negaron. Nadie se atrevería a levantar un dedo contra ese solterón empedernido.
En Coahuila tuvimos un presidente del Tribunal Tutelar para Menores de lujo: Ramón Saucedo Bosque, quien, en su efímero paso por la dependencia, entregó en adopción 40 niños. Estudiaba cuidadosamente a la pareja (o persona) que deseaba adoptar.
Si se hacían merecedores de un hijo, tras su entrega les daba seguimiento pudiendo recogerles la criatura si había maltrato u otra causal. Una pareja que ya había pasado todas las pruebas, cuando ya iba a recibir su niño exigió verlo antes. Ramón, recto como era, les negó la adopción: “Los niños no son sandías para dárselos calados”, les dijo. “Todavía no están preparados para ser padres”. Querían ver si era bonito. De 40, tres fueron al extranjero, una niña a París, otra a Noruega y un tercero a otra nación. Allá los hacía vigilar por el alcalde, la Policía o el párroco de la población a que pertenecían, para saber si había un trato cariñoso. Decía Ramón que nada más de un caso se arrepintió (entregado en Saltillo) aunque no pudo remediarlo ni hubo descuido suyo.
El señor inquisidor, Serrano Limón, piensa que es una bestialidad entregar niños a personas que viven en mal estado. Tiene razón. ¿Por qué no adopta él a unos ocho para que nos muestre cómo hacerlo? Josephine Baker, maravillosa cantante negra que danzaba semidesnuda, adoptó una ristra de niños huérfanos y, a pesar de su vida aparentemente disoluta, los educó bien (ella participó en la Resistencia francesa antinazi). René Spitz, un psicólogo inteligente y generoso, se ocupó de decenas de niños extraviados, abandonados y huerfanos durante la Gran Guerra, algunos recién nacidos. Entre enfermeras y guardias sin estudios sacaron adelante a esos pequeños sin presente ni futuro.
En la televisora norteamericana CNN acaban de entregar su máximo premio a una pareja de orientales que tiene ya más de treinta hijos, de los que nada más dos son biológicos. ¿Por qué andamos tan perdidos que preferimos que haya niños miserables, desdichados, hambrientos con tal que no caigan en “malas parejas”? Porque siempre nos vamos por lo morboso y nos falta corazón.
El proceso legal de adopción es muy engorroso. Si ahora mismo los jueces entregan pocos niños a parejas deseosas de adoptar ¿por qué no dejamos que los jueces decidan si dan o no niños? La sociedad no tiene nada qué opinar ante la encrucijada de hacer feliz o desventurado a un niño. No adopte usted si no quiere, pero ¿qué le importa que a terceros les interese hacerlo?
No han faltado algunos psicoanalistas despistados que hablan de que niños con un solo padre o en situación de orfandad (por ejemplo los que se forman en establecimientos comunitarios) no puedan resolver el conflicto edipiano. Ya hace muchos años el gran antropólogo Bronislaw Malinowski había atacado el concepto cuando encontró una tribu en los mares del sur en la que todos los niños eran hijos de todos los adultos sin reconocerse de una pareja y siendo educados comunitariamente. Halló que esos niños eran tan alegres y maduros como los niños londinenses de clase media.
Propongo revisar el problema desde todos los puntos de vista antes de condenar (o aplaudir) un cambio legislativo. ¡Vaya que tendrán trabajo nuestros diputados! Espero que esta vez ejecuten con seriedad su chamba. Los niños son sus rehenes.

OFICIO DE PAPEL

Columna semanal del periodista Miguel Badillo
Lunes 11 de enero de 2010
Abren expediente de fideicomiso aduanal
El Fidemica fue creado por Paco Gil Díaz
Inician investigación a Guzmán Montalvo
Repudio total al homicidio del periodista Valentín Valdés y mi solidaridad con su familia y mis colegas del diario Zócalo de Coahuila
En medio del repudio contra el gobierno federal por el abusivo incremento en el cobro de impuestos, Felipe Calderón parece sordo a las duras críticas de la población y ciego por permitir que se hagan negocios sucios al amparo del presupuesto público. Las pruebas de la corrupción gubernamental son muchas y evidentes, pero hay otras más finas para desviar recursos públicos, es el caso de los fideicomisos, a donde ingresan fondos del erario destinados a programas y proyectos específicos que nunca llegan a su destino y, en cambio, son canalizados para otros gastos, algunos personales de los servidores públicos.
Ante esa pasividad negligente y cómplice del gobierno calderonista para combatir la corrupción y utilizar mejor los miles de millones de pesos de los impuestos de los mexicanos, es el Congreso a través de su órgano de vigilancia, la Auditoría Superior de la Federación (ASF), el que ha asumido la responsabilidad de auditar la administración pública e impedir que burócratas corruptos sigan mal administrando el dinero de todos los mexicanos.
Por eso me llamó la atención una nota publicada el jueves pasado en la página 2 del diario Reforma, con el título Busca ASF sanción a exjefe aduanal, bajo la firma del reportero Víctor Fuentes, en donde se afirma que la Auditoría pretenden fincarle responsabilidad a José Guzmán Montalvo, quien fuera administrador general de Aduanas y cómplice del exsecretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz.
Según la información periodística, el motivo de la investigación es el supuesto uso indebido de más de 85 millones de pesos del Fideicomiso para el Programa de Mejoramiento de los Medios de Informática y Control de las Autoridades Aduaneras, mejor conocido como el Fidemica, por lo cual cinco exfuncionarios del Sistema de Administración Tributaria están citados por la ASF para que expliquen el desvío de recursos.
Y llama más la atención porque el Fidemica es sólo uno de los muchos fideicomisos que se manejaron desde la Secretaría de Hacienda bajo las instrucciones de Francisco Gil Díaz para desviar perversamente dinero de las arcas públicas, sin la posibilidad de que alguien los audite amparados en el secreto fiduciario y bancario. Lo mismo ocurrió con otros fideicomisos conocidos como Aduanas I y Aduanas II, o el FACLA, sólo por mencionar algunos de los más escandalosos y en donde los tres poderes, Ejecutivo, Judicial y Legislativo, fueron cómplices del gasto abusivo.
En esta columna hemos dado cuenta desde hace varios años de esos abusos y excesos cometidos por Gil Díaz al amparo de sus cargos públicos, que le han costado a la nación miles de millones de pesos, sin que hasta ahora gobierno alguno, tanto del PRI como del PAN, hayan hecho algo para someterlo a la rendición de cuentas, y en cambio son empleados menores, como Guzmán Montalvo y otros cuatro, quienes después de varios años podrían enfrentar acusaciones penales por daño patrimonial y peculado.
La corrupción del exfiscal de hierro
La historia negra de Gil Díaz se cuenta de varios sexenios, pero sólo en dos gobiernos, los de Carlos Salinas y Vicente Fox, quien fuera llamado el fiscal de hierro por su mano dura sólo contra sus enemigos y opositores, tejió una amplia red de complicidades al más alto nivel que involucró a los propios presidentes y secretarios de Estado, que le permitieron manejar al margen de la ley miles de millones de pesos a través de los fideicomisos Aduanas I y Aduanas II.
Ambas figuras jurídicas protegidas por el derecho fiduciario, concentraron indebidamente el producto del cobro del Derecho de Trámite Aduanero (DTA), que implicó daños patrimoniales de por lo menos 10 mil millones de pesos sólo durante la administración de Vicente Fox.
Ahora que el recién nombrado auditor superior de la Federación ha decidido llamar a cuentas a exempleados de Aduanas para que rindan cuentas por el desvío de recursos, sería interesante que también se abrieran otros expedientes como el que guarda el Órgano Interno de Control de Nacional Financiera –fiduciaria donde se constituyeron los fideicomisos Aduanas I y II–, en donde se detalla las anomalías y el claro desvío de recursos en que incurrió Gil Díaz y su equipo cuando se desempeñó primero como subsecretario en el sexenio de Salinas y después como titular de Hacienda en el gobierno de Fox. A pesar de estas anomalías, se sabe que Felipe Calderón había ofrecido la Secretaría de Hacienda a Gil Díaz, quien la rechazó y aceptó colocar a uno de sus incondicionales en Petróleos Mexicanos.
En el sexenio pasado, quien fuera secretario de la Función Pública, el chihuahuense Eduardo Romero Ramos, durante una comparecencia que sostuvo ante la Comisión de Fiscalización de la Cámara de Diputados por la glosa del V Informe de Gobierno de Vicente Fox, señaló como uno de los pendientes de su administración limpiar los fideicomisos aduaneros.
“El debate del fideicomiso Aduanas I sigue siendo motivo de discusión, por lo que ya se constituyó un fideicomiso público, el Fidemica, a donde se están yendo todos los recursos, y venimos discutiendo la liquidación del Aduanas I y de la empresa ISOSA (Integradora de Servicios Operativos S.A.) con el SAT”, decía desde aquel entonces quien al frente de la Secretaría de la Función Pública sólo sirvió de tapadera de la corrupción gubernamental.
La historia de ISOSA
En mayo de 1993 y en su calidad de subsecretario de Ingresos, Francisco Gil Díaz constituyó dos fideicomisos aduaneros que manejó al margen del presupuesto hasta 1994 y, posteriormente, cuando estuvo al frente de Hacienda, de 2001 a 2006 (ver libro ISOSA, fraude transexenal a la nación, editorial Grijalbo).
Mientras que en los años recientes la pieza clave fue el presidente del SAT, quien desde esa posición manejó miles de millones de pesos producto del DTA (Derecho de Trámite Aduanero), además de conducir el proceso de “legalización y transparencia” de los fideicomisos aduaneros, ordenado en diciembre de 2003 por el entonces presidente Vicente Fox.
De acuerdo con la ASF, en los primeros cuatro años de la administración foxista los fideicomisos 954–8 Aduanas I y Consorcios de Comercio Exterior II (conocido éste como Aduanas II), así como la empresa ISOSA, causaron quebrantos a la hacienda pública por 10 mil 183 millones de pesos. Esto sólo en lo que se pudo investigar, pues por instrucciones de Gil Díaz, Nacional Financiera se negó sistemáticamente a proporcionar la documentación sobre el manejo de los recursos públicos de los dos fideicomisos.
De la multimillonaria suma que defraudó el exsecretario de Hacienda, según lo documentado por la ASF, el SAT sólo reintegró mil 457 millones de pesos a las arcas federales. Ello, a pesar de que el exauditor González de Aragón indicó que gracias a que la Auditoría Superior estuvo señalando durante cuatro cuentas públicas “la presunta ilegalidad” de los depósitos en los fideicomisos privados Aduanas I y Aduanas II, y su conexión con ISOSA, se consiguió que Hacienda devolviera 2 mil 457 millones de pesos a la Tesorería de la Federación (Tesofe).
Y es que mientras el auditor decía que “valió mucho la pena haber señalado todas estas situaciones irregulares que generaron la recuperación del 25 por ciento de todo lo que había sido señalado por la Auditoría”, los resultados del informe 2005 lo desmienten.
Del análisis hecho por la ASF a la fiduciaria Nafin, se desprende que el SAT ordenó a la Tesofe la devolución de mil de los 2 mil 457 millones de pesos que había reintegrado a la hacienda pública.
La auditoría 05–2–06HIU–02–596 revela que mediante el oficio 327–SAT–0565 del 7 de noviembre de 2006, el administrador general de Innovación y Calidad del Servicio de Administración Tributaria solicitó a la Tesorería la devolución de mil millones de pesos a Nafin, en su carácter de fiduciaria del Fideicomiso 954–8 Aduanas I, mediante depósito en la cuenta número 2647324927, abierta en el Banco de México.
Esta petición se basó en la regla 1.3.1.0. de la segunda resolución de modificaciones a las reglas de carácter general en materia de comercio exterior para 2006, publicada por el expresidentes del SAT, Zubiría Maqueo el 6 de noviembre de ese año en el Diario Oficial de la Federación, tan sólo un día antes de la solicitud de la devolución, destaca la ASF.
Ante esta irregularidad, la Auditoría solicitó al Órgano Interno de Control en el SAT investigar el soporte y sustento de esta devolución de mil millones de pesos y, en su caso, iniciar el procedimiento para fincar responsabilidades administrativas y penales que puedan derivarse de los actos u omisiones de los servidores públicos en su gestión.
El informe revela que el SAT justificó esta transferencia como una permuta: en una reunión aclaratoria con los auditores, el órgano desconcentrado de Hacienda indica que a cambio de los mil millones de pesos, el 16 de noviembre de 2006 el Aduanas I aportó dos donativos por un total de 796 millones 819 mil 412 pesos.
Además de que la dependencia a cargo de Zubiría Maqueo no aportó documentación soporte sobre estas supuestas donaciones, la ASF acusa que aún cuando probara los movimientos financieros que alude, faltarían 204 millones 180 mil pesos en detrimento del erario.
Además, el máximo órgano de fiscalización en México señala que el donativo es una situación ajena a la sustracción irregular de los mil millones de pesos, cifra que representa un nuevo quebranto a las finanzas públicas. Por ello advierte que emitirá un pliego de observaciones en contra del SAT.
Otra anomalía encontrada en este caso se refiere a la solicitud de intervención del Órgano interno de Control, dependiente de la Secretaría de la Función Pública, mismo que resolvió fast track antes de que terminara el sexenio de Vicente Fox que “no se encontraron elementos que permitan evidenciar responsabilidad administrativa con respecto del administrador general de Innovación y Calidad del SAT, por haber autorizado a la Tesofe la devolución del importe referido, de conformidad a la solicitud de Nafin”.
En el tema aduanero, el exauditor González de Aragón dice que “lo que logramos en beneficio de la transparencia fue el inicio de la liquidación de los fideicomisos Aduanas I y Aduanas II, y la constitución de dos fideicomisos públicos, el Fidemica y el FACLA. Esta fue una decisión por el camino correcto”.
Pero la transparencia del FACLA (Fideicomiso para Administrar la Contraprestación a que se refiere el Artículo 16 de la Ley Aduanera), creado a mediados de 2004 para sustituir al Aduanas I, se pone en entredicho en el propio informe de la ASF.
El amplio análisis revela la posición del SAT frente al manejo de los millonarios recursos obtenidos por el cobro del DTA: “el FACLA es un fideicomiso que, a pesar de ser público, recibe exclusivamente recursos provenientes de las contraprestaciones a que se refiere el artículo 16 de la Ley Aduanera, mismos que tienen el carácter de privados. Como resultado de ello, los servicios que son financiados con recursos provenientes de dicho fideicomiso, no se financian con recursos públicos.
“En ese sentido, la administración y aplicación de los recursos concentrados en el citado fideicomiso no afectan en ninguna forma la Cuenta Pública. Asimismo, las personas morales que reciben pagos del fideicomiso en cuestión, no reciben ni administran recursos públicos, por lo que los pagos efectuados no afectan en modo alguno la Cuenta Pública. Lo anterior quedó confirmado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación al resolver, por sentencia del 14 de agosto de 2006, la controversia constitucional 84/2004, en la cual se determinó que las contraprestaciones establecidas en el artículo 16 de la Ley Aduanera no tienen el carácter de recursos públicos”.
oficiodepapel@contralinea.com.mx

¡YA BASTA, PRESIDENTE!

Teodoro Rentería Arróyave (especial para ARGENPRESS.info)
Tuvo que ocurrir el homicidio de periodistas número 99 o el 65 de los últimos nueves años o el 35 en el periodo que lleva la actual administración de Felipe Calderón Hinojosa en la persona del joven reportero, Valentín Valdés Espinosa para que medios de comunicación, el gobierno de Coahuila y la iglesia unieran su voz al del gremio organizado para exigir al gobierno federal justicia y terminar con esta ola de exterminio de comunicadores que sólo busca conculcar las libertades de prensa y expresión.
Este es en sustancia el comunicado que oportunamente se envío a la opinión pública: El compañero Valentín Valdés Espinosa, periodista de Saltillo, Coahuila, fue asesinado después de ser privado de la libertad en compañía de otro colega quien posteriormente fue liberado. Otro que los acompañaba no fue levantado.
Con este crimen, el primero del 2010, suman 65 los periodistas asesinados en México del 2000 a la fecha. El diario evitó revelar los nombres de los reporteros que salvaron la vida
Valdés Espinosa fue uno de los reporteros fundadores del “Zócalo de Saltillo”, desde que el matutino iniciara publicaciones, el 13 de junio de 2008. Antes, por más de seis años trabajó en el periódico “Palabra” de Grupo Reforma.
El compañero era reconocido en Coahuila por su profesionalismo, dedicación, pasión y entrega hacia el periodismo.
¡Ni uno más Señor Presidente de la República! Es urgente que demuestre en los hechos su voluntad política para avanzar en la protección de la libre expresión de las ideas. “Unidos por la palabra libre” Roberto Piñón Olivas, presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX; Teodoro Rentería Arróyave, vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas FELAP-México y Raúl Gómez Espinosa, secretario general de FPERMEX.
Por su parte el obispo de Saltillo, Coahuila, Raúl Vera López tanto en la misa de cuerpo presente del colega victimado, Valentín Valdés como en entrevista posterior, declaró severo, que los mexicanos no podemos resignarnos a vivir en un país con el mayor número de periodistas asesinados, “No podemos resignarnos a que la tragedia de nuestro hermano Valentín es irreparable y a que mañana surja otro caso”, es urgente, concluyó, una reacción del gobierno nacional para detener las agresiones contra periodistas, pues “no pueden estar viviendo y realizando su trabajo con el riesgo constante de ser agredidos”. “México es un país con más periodistas asesinados en el mundo; eso es vergonzoso y no podemos resignarnos a que eso siga sucediendo”.
“¡Ya Basta, Presidente!”, proclamó por su parte el gobernador de la entidad, Humberto Moreira Valdés, al dirigirse sin cortapisas a Felipe Calderón Hinojosa y agregó: “ya basta de grillar a los estados, es tiempo de que les regrese algo de lo que le damos”, y advirtió que el asesinato del periodista Valentín Valdés Espinosa es reflejo del fracaso que el gobierno federal está teniendo en el combate al crimen organizado.
Todos: periodistas, gobiernos estatales, iglesia y el pueblo en su conjunto estamos en esa misma postura, : ¡Ya basta, Presidente!

SOBRE LA GUERRA

Carlos Fazio
La así llamada pacificación del país –eufemismo orwelliano para la realización de lo contrario–, aunque más letal que en Irak o Afganistán, es algo distinto de una guerra. Se trata de una violencia reguladora de la economía criminal (término técnico tomado del léxico de la contabilidad ajuste de cuentas), que en la actual ofensiva policiaco-militar del Estado mexicano incorpora algunos elementos de la lucha antisubversiva.
En las postrimerías del foxismo, los operativos en Atenco y Oaxaca fueron sendos laboratorios de una guerra sicológica contra masivas protestas sociales organizadas, que vinieron a sumarse al cerco de aniquilamiento vigente en Chiapas en el área de influencia del EZLN. A partir de diciembre de 2006, con Felipe Calderón en Los Pinos, la presencia masiva de militares y fuerzas paramilitares del Estado en vastas extensiones del país, respondió al ABC de la contrainsurgencia clásica, experimentada parcialmente en el sur-sureste mexicano tras la insurrección zapatista.
Junto con prácticas propias de un Estado de excepción y bajo el argumento de la recuperación del territorio (ergo, retomar la plaza en poder de otro cártel criminal), se ha venido llevando a cabo una diseminación geográfica de las fuerzas armadas y una cuadriculación contrainsurgente del territorio nacional, aplicándose detenciones, arraigos y allanamientos sin orden judicial y estableciendo retenes con varios casos de víctimas mortales, con el objetivo encubierto de imponer un control de población de facto, así como la destrucción preventiva de organizaciones definidas desde la óptica castrense como herramientas del enemigo interno. Cabe recordar que un informe de la Sedena (La Secretaría de la Defensa Nacional en el combate al narcotráfico, 2008), proyectaba una simbiosis entre cárteles criminales y grupos armados desafectos al gobierno, a los que había que aniquilar.
Sujetos a una legalidad aparente, merced a un Congreso y un Poder Judicial cómplices y obsecuentes, en el marco de esa guerra difusa e indefinida, el Ejército y la Marina han renovado funciones similares a las de los años del plomo del diazordacismo y el echeverriísmo. Entre ellas, la inteligencia política y la acción policial, que en tiempos normales incumben a las autoridades civiles. Y es bien sabido que quien dice información dice interrogatorio y entonces tortura, lo que lleva a hacer saltar por los aires la picota de la legalidad.
Un resultado concreto de ese trabajo de limpiador de cloacas –como lo llamaba el general Massu en Argelia– es la multiplicación de denuncias por violaciones a los derechos humanos cometidas por integrantes de las fuerzas armadas. No obstante, de manera subrepticia, los militares se han venido arrogando competencias policiales y terminaron reclamando, en particular, una legislación de excepción hecha a su medida.
En nombre de hacer más eficaz la lucha contra el crimen y la subversión, el Ejecutivo federal ha elevado al Congreso iniciativas de ley que buscan eliminar las restricciones políticas de tiempo de paz y limitar las garantías de los derechos humanos universales, que (en principio) hacen ilegítimas la práctica rutinaria de la tortura, las ejecuciones sumarias extrajudiciales y la desaparición forzosa de personas, así como la existencia de escuadrones de la muerte y grupos de limpieza social, elementos, todos, propios de la guerra sucia. Un modelo político-militar que no es ni más ni menos que la matriz del terrorismo de Estado.
Cabe advertir que la guerra sucia, tal como la practicaron los franceses en Argelia, Estados Unidos en el sureste asiático y los regímenes de seguridad nacional en Centro y Sudamérica, entraña la emergencia de una ideología reaccionaria y antirrepublicana, incluso una deriva fascista, en el seno de la institución militar, que la impulsa a reivindicar el ejercicio directo del poder según un programa en el que la dictadura es erigida a rango de arma de guerra. Según la experiencia, en esos regímenes el enemigo subversivo y la población que le da apoyo constituyen los objetivos que se deben intoxicar propagandísticamente, persuadir o aniquilar por todos los medios.
En ese contexto, el asesinato de la luchadora social Josefina Reyes en Ciudad Juárez; los homicidios de testigos protegidos, como el ex agente federal Édgar Bayardo (¿fuego amigo?); el suicidio inducido (o la eliminación) de Jesús Zambada, quien apareció ahorcado en un recinto de la PGR, así como el medio centenar de balas que terminaron con Arturo Beltrán Leyva, permiten constatar la presencia de algunos rasgos típicos del terrorismo de Estado. Verbigracia, en el caso de la exposición pública del cadáver de Beltrán, exhibido como trofeo y con mensajes en código entre pares, todo indica que se trató de una ejecución con valor ejemplarizante que sigue los cánones de la guerra sucia, según los cuales se debe terminar con los heridos y asesinar vencidos o sospechosos en represalia por la muerte de soldados o para vengar camaradas. No se trata de una falla del sistema, sino de una ejemplaridad al margen de la ley, que desnuda a los ejecutores y al Estado mafioso.
Así como la tortura y la desaparición forzosa (hoy levantones) son factores esenciales de la lucha contrainsurgente, la exposición pública de cadáveres de enemigos –o narcos, da igual– es una técnica de la guerra sicológica. A lo que se suman el helicóptero como instrumento de combate, el espionaje masivo, los autoatentados y sabotajes, los vehículos sin placa, las cárceles clandestinas. Muchos de esos elementos reaparecen en México, incluida la importación, ahora, de los falsos positivos (en Colombia: civiles detenidos y asesinados por el Ejército, que se hacen pasar por guerrilleros muertos en combate) y la cédula de identidad biométrica de impronta estadunidense.

RADIO Y TELEVISIÓN ALIMENTAN EL ABORREGAMIENTO DE LA GENTE

Andrés Manuel López Obrador apuesta al trabajo de concientización de la genteFoto Carlos Ramos Mamahua
Radio y televisión alimentan el aborregamiento de la gente
Han hecho creer que no había otra que aumentar precios
Lo que padece hoy la economía popular es resultado de la prepotencia, el cinismo y la saña del grupo que gobierna al país. Priístas y panistas aprobaron los impuestos y el aumento a las gasolinas, y de manera mafiosa los gobernadores del PRI se repartieron el botín
Ciro Pérez Silva
Periódico La Jornada
Lunes 11 de enero de 2010, p. 6
El aborregamiento que alimentan los medios electrónicos de comunicación entre millones de mexicanos ha hecho creer a la gente que no había más alternativas ante la crisis que aumentar impuestos, incrementar el costo de las gasolinas y por ende el de todos los productos. Nosotros presentamos más de una vez un proyecto alternativo que, sin impuestos ni aumentos, resolvía el déficit de las finanzas públicas, promovía la producción y protegía el empleo, aseguró Andrés Manuel López Obrador.
Lo que padece hoy la economía popular es resultado de la prepotencia, el cinismo y la saña del grupo que gobierna al país, afirmó en entrevista con La Jornada.
Son prepotentes porque desde septiembre, al margen del Congreso, decidieron los aumentos, y son cínicos porque saben que con el control de los medios, principalmente de la televisión, pueden tripular las decisiones, manipular y determinar el modo de pensar de ese grupo de mexicanos que todavía está adormilado y que sigue creyendo que en México no hay de otra, que sólo existe la voluntad de la mafia que gobierna al país.
–¿Qué parte de la crisis se resolvió al aumentar impuestos y precios?
–No resolvieron siquiera el déficit fiscal. Nosotros denunciamos, y hay constancia de ello, que los aumentos los acordó la cúpula que encabeza Carlos Salinas y que operaron sus empleados Manlio Fabio Beltrones en el Senado, Francisco Rojas en la Cámara de Diputados, Felipe Calderón desde Los Pinos y el gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto.
Y no sólo nos manifestamos dos veces en la Cámara y una en el Senado en contra de los aumentos, sino que presentamos dos iniciativas: una para promover la austeridad republicana y otra para terminar con los regímenes especiales, particularmente la consolidación fiscal, cerrándole el paso a la cantaleta de que no hay de otra.
Con la primera iniciativa se hubieran conseguido ahorros por 200 mil millones de pesos y con la segunda se obtendrían 300 mil, es decir, 140 mil millones de pesos más que el déficit de las finanzas públicas, indicó.
No resolvieron siquiera el problema de los recursos del gobierno, menos aún el de la carestía para millones de mexicanos.
–¿Qué pasó con sus propuestas?
–Al final, priístas y panistas se pusieron de acuerdo, aprobaron los impuestos y el aumento a las gasolinas y al gas, y de manera mafiosa Peña Nieto y los gobernadores del PRI se repartieron el botín o lo que van a obtener con este nuevo sacrificio de los mexicanos, especialmente en los estados donde este año habrá elección a gobernador.
–Usted advirtió desde septiembre de ese aumento de los combustibles y de lo que eso significaría para el costo de bienes y servicios.
–Dijimos que el aumento a las gasolinas era lo que iba a propiciar más carestía. Entonces preguntaban que de dónde sacaba yo eso, cuando nosotros sabíamos ya de ese pacto de la mafia. Ahora la gente está padeciendo mucho por esos aumentos, y el PRI y el PAN se echan la culpa unos a otros de manera hipócrita, y todo esto con el acompañamiento de los medios de comunicación. De repente aparece como noticia principal en todos los periódicos que Manlio Fabio Beltrones se queja de los aumentos a las gasolinas, cuando él fue parte de quienes pactaron esos aumentos. Sin embargo, aparece como el paladín de la defensa de la economía popular, y en la mayor parte de los medios no se dan los antecedentes ni se le cuestiona para nada.
Andrés Manuel López Obrador apuesta al trabajo de concientización de la genteFoto Carlos Ramos Mamahua
–¿Por qué trata de desmarcarse el PRI de ese acuerdo?
–Porque es parte del recambio que ya echaron a andar los de la mafia del poder. Ahora está permitido ningunear a Calderón, cuestionar al PAN, pero ya no se toca al PRI ni a Peña Nieto, porque es su proyecto para 2012 y en eso tienen mucho que ver los medios de comunicación.
–¿De qué forma?
–Hay que ver cómo promueven a un actor como virtual presidente de la República. Peña Nieto es el candidato de la tele, es el candidato de Emilio Azcárraga y de la mafia de la política, con todos los riesgos que eso implica. Al mismo tiempo que impulsan a este actor, en una operación de recambio han dejado caer al PAN y a Calderón.
–Ante esto, ¿que es lo que hace su movimiento?
–Nosotros tenemos que concientizar a la gente sobre cómo opera esta mafia que ha venido medrando a costa del sufrimiento de la mayoría de los mexicanos, y llamar a su integrantes por su nombre. Hablar de Carlos Salinas, Claudio X. González, Roberto Hernández, Emilio Azcárraga, de los 10 hombres más ricos del país.
La gente se enoja con los políticos o con los voceros de las cadenas de televisión o radio, cuando ellos sólo son empleados. La culpa del desastre nacional es de ese grupo de potentados que no vamos a poder frenar si la gente no participa de manera ordenada para buscar una verdadera democracia. Hay que crear conciencia de que las instituciones están al servicio de esa cúpula, de que no hay estado de derecho.
–¿Cómo hacerlo con la presencia tan fuerte de los medios electrónicos?
–Hay que entender que el hombre es producto de su circunstancia y no menospreciar el poder de los medios electrónicos. Es mucho mayor de lo que uno se imaginaría la influencia que tienen sobre la población. Esa especie de aborregamiento que se está dando, de falta de conciencia, de adormilamiento entre la gente, es producto del incesante bombardeo de los medios, sobre todo la televisión.
“Ahí está la clave de todo, el principal sostén del régimen opresor es el control que ejercen a través de la televisión. No olvidemos que 75 por ciento de la población en México se entera por este medio, y cerca de 15 por ciento a través de la radio.
“Emilio Azcárraga y los dueños de Televisa, que son al mismo tiempo los 10 hombres más beneficiados de la política económica que se ha aplicado, son los que tripulan el pensamiento de millones de mexicanos.
A pesar de esta tremenda influencia, yo estoy convencido de que la gente va a terminar por despertar. Depende mucho del trabajo de concientización que nosotros hagamos. Por eso es importante que este año sea el de la revolución de las conciencias. Mientras no haya un despertar de conciencias, desgraciadamente las cosas no van a cambiar.
Gracias Andrés Manuel por tu congruencia y perseverancia, aquí seguimos y aquí seguiremos a tu lado en la Revolución de las Conciencias.

Mensaje AMLO 11 de enero de 2010

Apartir de hoy, Andrés Manuel Lopez obrador, dará un mensaje en video.

PERVERTO RIVERA CRITICA A UNIONES GAY:

"Perversa, toda ley que se oponga a Dios"
"No podemos obedecer a los hombres ante esta inmoralidad"
"Se lleva a la sociedad a la degradación moral y la ruina, advierte el jerarca religioso"
"La Iglesia católica, víctima de persecuciones ideológicas"
los moneros le contestan:
Destapados-Rocha:

Adivinen cuáles-Helguera: