martes, 29 de septiembre de 2009

EL QUE TRAICIONA UNA VEZ, TRAICIONA DOS VECES

Acapara el PRI comisiones en San Lázaro; con el PVEM controlará todas
JESUSA CERVANTES
MÉXICO, D.F., 29 de septiembre (apro).- El PRI y el Partido Verde formarán mayoría en todas las comisiones de la Cámara de Diputados --con lo que podrán aprobar o bloquear modificaciones a leyes que deseen--, luego de que este martes los principales partidos, PRI, PAN y PRD lograran un acuerdo para la conformación de las 44 instancias.Con el acuerdo logrado, 20 comisiones se las apropió el PRI; 12 el PAN; seis el PRD; tres el PVEM. Convergencia, PT y Panal, se quedaron con una cada uno.Cada comisión está integrada por 30 legisladores y todas las decisiones se aprueban por mayoría simple, es decir, 50% de los integrantes más uno. El PRI, por contar con 237 legisladores, contará con 14 espacios en cada comisión, más dos de sus aliados del PVEM, será mayoría y, por lo tanto, el control de todas las decisiones.
El coordinador de la fracción, Carlos Rojas precisó que el PRI que tiene 47.4% de la representación, pero con la alianza que mantiene con el Partido Verde, logra "un poco más del 50%".
--¿Eso le garantiza al PRI sacar leyes por mayoría?
--Sí, pero nosotros aspiramos a sacar las leyes por consenso. Sólo en caso de que el interés general así nos lo dicte, haríamos uso de la mayoría --respondió en entrevista.
Al término de la comparecencia de la secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa, el presidente de la Mesa Directiva, el panista Francisco Ramírez Acuña, decretó un receso hasta las 20:00 horas. Sin embargo, la falta de acuerdos con el PRD ante la inminencia de perder la Comisión del Distrito Federal, retrasó el inicio de la sesión
Hasta las 22:30 horas, el pleno de la Cámara de Diputados aún no aprobada la integración de comisiones. Se espera que se llegue a un acuerdo al filo de la media o en las primeras horas de este miércoles. El problema se inició cuando se difundió el acuerdo entre el PRI y el PAN para que la panista Gabriela Cuevas encabece la Comisión del Distrito Federal. El PRD rechazó la propuesta.
En un intento por resolver el problema, la coordinadora del grupo parlamentario del PAN, Josefina Vázquez Mota, propuso al PRD una segunda secretaría en dicha comisión y el coordinador de los perredistas, Alejandro Encinas, pudiera calmar los ánimos de sus compañeros de partido.
El reparto
Entre las principales comisiones, el PRI presidirá la de Presupuesto, con Luis Videgaray; de Hacienda, con Mario Alberto Becerra Pocoroba; el PRD, la de Vigilancia, con Armando Ríos Piter; el PVEM, la de Función Pública, con Pablo Escudero o Samuel Ramos.
El PRI también presidirá la de Justicia, con Humberto Benítez Treviño al frente; la de Desarrollo Metropolitano, con Alfonso Navarrete Prida; de Desarrollo Social, con el veracruzano José Yunes Zorrila.Por su parte, el PT presidirá la de Relaciones Exteriores, con Porfirio Muñoz Ledo al frente, mientras que la de Radio y Televisión, el PVEM.
El PAN encabezará la de Energía, con Felipe de Jesús Cantú Rodríguez, así como la Comisión del Distrito Federal, que presidirá la exjefa delegacional en Miguel Hidalgo, Gabriela Cuevas.
Al PRI también le tocaron las comisiones de Agricultura y Ganadería, con el líder de la CNC al frente, Cruz López; de Asuntos Indígenas, con Manuel García Corpus; así como las de Comunicaciones; Defensa Nacional, Economía, Educación, Recursos Hidráulicos, Reforma Agraria, Reglamento y Prácticas Parlamentarias, Pesca, Trabajo, Transporte, Turismo, Derechos Humanos y Atención a Grupos Vulnerables.
El PAN tendrá, además de las comisiones de Hacienda y del Distrito Federal, la de Gobernación, con Javier Corral al frente; la de Cultura, con Kenia López; de Desarrollo Rural, con Javier Usabiaga; Fortalecimiento al Federalismo, Octavio Pedroza; Población, Frontera y Asuntos Migratorios, con Norma Leticia Sanchez; Salud, con Julián Velásquez; Seguridad Pública, con José Luis Ovando; de Vivienda, con Martín Rico, y la de Juventud y Deportes.
El PRD, que aspiraba a presidir la Comisión del Distrito Federal, se quedó con la de Puntos Constitucionales, con Arturo Santa o el exministro Juventuno Castro y Castro; Equidad y Género, Fomento Cooperativo, Marina y Seguridad Social.
Al PVEM: Función Pública, Radio y Televisión, y Medio Ambiente y Recursos Naturales. Nueva Alianza, Ciencia y Tecnología; PT, Relaciones Exteriores; y Convergencia, presidirá la Comisión de Participación Ciudadana.
Además, se crearán comisiones especiales, la primera Sur-Sureste que presidirá la oaxaqueña del Sofía Castro, del PRI; Regimenes Especiales, a cargo del priista Sebastián Lerdo de Tejada; Casitas del Sur, para el PAN, y una más que investigará la tragedia de la guardaría ABC de Hermosillo, a cargo del PRD. Durante todo el fin de semana y este lunes se estuvieron conformando los acuerdos; el primer bloqueo lo implicó la Comisión de Vigilancia y una vez sorteada la discusión, el otro escollo fue el reparto de la Comisión del Distrito Federal. Mientras la integración de los perredistas en las distintas comisiones retrasaba la aprobación de las comisiones en el pleno, los diputados del área económica del PRI discutían junto con sus similares del Senado la conformación de un nuevo paquete económico.
El encuentro entre senadores y diputados del área económica y financiera se realizó en la llamada "pesera" del grupo parlamentario del PRI en San Lázaro, a la cual asistió el senador Manlio Fabio Beltrones, y los diputados Luis Videgaray, Alberto Cano y Jorge Herrera, así como su coordinador parlamentario, Carlos Rojas.

"SON CAPACES DE MARAE A ZELAYA Y DECIR QUE SE RESISTIÓ", AFIRMA SACERDOTE HONDUREÑO

El Padre Fausto Milla, en Santa Rosa de Copán.
“La prepotencia del gobierno golpista es demasiado grande, y por eso la gente piensa que van a meterse a la Embajada de Brasil: yo creo que Manuel Zelaya va a morir y que van a decir que se resistió.” La voz del sacerdote Fausto Milla suena en el teléfono desde Santa Rosa de Copan, una región que agrupa cinco departamentos en el occidente de Honduras. Este hombre de 82 años, uno de los referentes de los movimientos sociales y organizaciones populares, mantiene una postura rotundamente opuesta a la de la cúpula eclesiástica hondureña, que dirige Oscar Andrés Rodríguez, un cardenal que bendijo desde el comienzo la cruzada del presidente de facto Roberto Micheletti. “Yo creo que Mel va a morir diciendo que él no quiere un solo muerto más en Honduras, que todo debe ser pacífico, que la razón tiene que triunfar”, apuntó.
Milla estuvo el domingo en el velorio de Wendy Elizabeth Avila, una manifestante que murió como consecuencia de la represión. “He visto tantos cuerpos castigados a garrotazos, mujeres que me mostraban sus brazos, horriblemente golpeados”, relató, y apuntó que la marcha de ayer en Tegucigalpa para repudiar el cierre de Radio Globo y Canal 36 disminuyó algo el caudal de manifestantes –unos 5000– debido a “las amenazas de muerte, que cada vez son más fuertes”. “Estamos con entera desinformación, porque los únicos medios que llegaban al pueblo fueron clausurados y destruidos –contó–. Los militares rompieron las puertas y se llevaron los equipos. Según acabo de saber, los periodistas están libres, consiguieron escapar a tiempo. Ahora aquí la información es ‘de tú a tú’, o por Internet, o vía radios o canales de afuera. Está Radio Progreso en el norte, pero dicen que es inminente su clausura. Es que ellos tienen que cortar con todo: el decreto de suspensión de garantías dice que clausurarán toda comunicación social que manifieste desprecio, o disgusto, unos términos que se prestan para cualquier cosa.
La ley, ahorita, es prohibido pensar, hablar, oír.

Prohibido ser humano.

Esta es la situación en Honduras.”


Seguidores del presidente Manuel Zelaya gritan consignas acostados en el suelo en Tegucigalpa. (Foto AP)
Tras sucesivas denuncias de la masacre de campesinos del río Sumpul, a comienzos de los años ‘80, Milla fue perseguido y detenido por los escuadrones de la muerte. Tuvo que exiliarse y recién pudo volver en 1986. Aquella represión y ésta tienen un nombre en común: Billy Joya Améndola, creador de los escuadrones y ministro asesor de Micheletti. “Se sienten sus estrategias, sus modos de persecución, con tácticas más peligrosas todavía –dice Milla–. Ahora se cuidan un poco más y disimulan los crímenes, los hacen aparecer como desgracias, o como asesinatos hechos por delincuentes comunes. Nos cuidamos, tratamos de no salir solos a la calle. Tomamos nuestras medidas de seguridad.”
“Lo peor, lo triste, es que desde hace tiempo se viene pidiendo auxilio al mundo y no pasa nada: solo hablan y hablan –cuestionó el sacerdote–. Tenemos organismos de miles y miles de millones de dólares, como la ONU y la OEA, y nada: la gente aquí tiene que sufrir y morir calladamente. Sólo acuden al auxilio del que está mal cuando se murió. Acuden al entierro.” Milla le reclamó un bloqueo económico total al gobierno norteamericano: “Si lo hicieron durante 50 años a Cuba, ¿qué les cuesta hacerlo cinco o diez días contra Micheletti? –planteó–. Con eso se acaba el problema, pero no se atreven, porque el dinero vale más que la vida humana. Si las naciones del mundo no actúan en nombre del pueblo hondureño, los golpes se van a desencadenar por toda América latina de acuerdo con la conveniencia de los golpistas de Estados Unidos y del continente. Honduras ahorita es un laboratorio. Y si tienen éxito, El Salvador tiembla: la oligarquía allí ha demostrado sus barbaries contra el pueblo durante tantos años, apoyada por Estados Unidos… El interés real es desbaratar el ALBA: ellos tienen modos de golpear en cada país, sobre todo en Centroamérica, por donde empezaron.”
Milla señaló que los candidatos de los principales partidos no se pronuncian con contundencia sobre las sucesivas violaciones institucionales y a los derechos humanos por una sencilla razón: “Es que son todos de ellos, de los golpistas”, dijo. Con respecto a la cúpula eclesiástica de Honduras fue acaso más áspero: “Allá, en Tegucigalpa, esa gente recibe dinero de los políticos, de los gobiernos: eso es lo que pelean, nada más –dijo–. Ahí se cumple lo que dice Al Gore: ‘El apareamiento incestuoso del poder y el dinero es el peor enemigo de la democracia’, a lo que yo agrego ‘de la iglesia, también’. Pero no hay que confundir eso con la iglesia del pueblo’”. En torno de Juan José Pineda, el obispo que visitó a Zelaya en la embajada, Milla señaló que “es un acólito del cardenal (Rodríguez), basura de gente”. El religioso diferenció y contrapuso al obispo de su diócesis, Luis Alfonso Santos, opositor al golpe, y explicó que “cuando un cardenal se comporta como Judas, la gente se confunde”.
El domingo, también, pudo llegarse hasta la puerta de la embajada, donde habló unos minutos con la primera dama, Xiomara Castro. “Lo que hizo Mel es de una audacia increíble, de novela –concluyó–. Nadie sabe cómo llegó a Tegucigalpa, ni siquiera su mamá. Y esa burla que le ha hecho a la inteligencia del Ejército, que se cree tan poderoso, es lo que los tiene más enfurecidos y confundidos. Y eso los ha llevado, también, a estos extremos de ayer, de dejarnos ya sin garantías constitucionales.”

EJÉRCITO DESAFORADO

Utopía
Eduardo Ibarra Aguirre
Cuando el general José Francisco Gallardo Rodríguez presentó en la revista Forum la propuesta académica para la creación del ombudsman militar, en octubre de 1993, resultaba impensable el desastre que provocó el Ejército en materia de derechos humanos con la Guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado, el programa de gobierno favorito de Felipe de Jesús Calderón Hinojosa.
Tampoco podía preverse que merced a esa desmesurada aventura política --por lo menos en su origen de dotar de legitimidad a Calderón Hinojosa como primer empleado de la República--, el alto mando de la Secretaría de la Defensa Nacional, encabezado por Guillermo Galván Galván, se ganaría a pulso que el 54 por ciento de la ciudadanía estime hoy que el Ejército ha violado los derechos humanos.
La formidable percepción está contenida en Carta Paramétrica, recibida el 3 de septiembre en el buzón electrónico de Utopía, y es uno de los resultados de la encuesta levantada el 16 y 17 de agosto por Parametría.
Por si lo anterior no fuese suficiente, 55 por ciento de los encuestados considera que los militares deberían tener juicios civiles y sólo 30 por ciento cree que se debe de continuar con el esquema de derechos especiales. Dicho de otro modo, por primera vez el fuero de guerra es sometido a impugnación por la mayoría de los ciudadanos.
Otros datos que arroja la encuesta y que cuestionan también las acciones de los militares, es que 35 por ciento de la población cree que la Guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado se puede ganar. En tanto que un apabullante 57 por ciento estima que se va perdiendo. Lo anterior, a pesar de la tan ensordecedora como costosa campaña del duopolio televisivo y el oligopolio radiofónico, ordenada por el único mexicano que se disfraza de general sin serlo. Disfraz que además amplía a sus hijos, mientras la Sedena no cuidaba que el uniforme fuera de la talla del padre de familia.
Además de todo lo anterior, 40 por ciento de los encuestados estima que no es mala la idea de negociar y luego tolerar las actividades del narcotráfico con tal de que hubiera tranquilidad en el país, lo cual pone en relieve el agobio ante la incapacidad del grupo gobernante y del Estado mismo para brindar seguridad, la primera y elemental tarea estadual. Ante el desbordamiento del poder financiero y económico --en primer lugar y que nadie se ocupa de combatir--, comercial y paramilitar, criminal y corruptor, resurge la idea de la negociación para acotarlo y hasta tolerarlo, con las políticas de 1964-2000.
Con el nuevo y alentador panorama ciudadano que hace 15 años ni el ahora doctor Gallardo Rodríguez ni este editor nos imaginamos presenciar, vivir, los encuestadores postulan. “Sin embargo la confianza en el Ejército no ha disminuido. Los niveles de confianza en la institución siempre son de los más altos entre las instituciones del país (alrededor de 65%), sólo por debajo de la Iglesia o las universidades.”
La interpretación es incompleta, pues omite que el Ejército más que respetado es temido por una porción nada despreciable de los mexicanos.
Sucede lo que con varios mitos en este país reproductor de ellos. Por ejemplo: hasta el 2000 los mexicanos eran priístas mientras no demostraran lo contrario”. Y el 2 de julio de aquel año, las urnas y los acuerdos en las elites dominantes derrumbaron la máxima. O las cuentas alegres de la jerarquía católica que convierte en su rebaño a 85 de cada 100 mexicanos, cuando la primera padece una decreciente credibilidad.
Con los datos duros de Parametría en la mano, lo cierto es que el Ejército fue desaforado por la ciudadanía. Pero el grupo gobernante sólo puede operar apuntalado por él.
Acuse de recibo
El ejército mexicano entre la guerra y la política, de Guillermo Garduño Valero y publicado por la Universidad Autónoma Metropolitana, será presentado el jueves 8, a las 19 horas, en la Casa de la Primera Imprenta de América, ubicada en Licenciado Primo de Verdad 10, a un costado de Palacio Nacional… Recordatorio de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos: “Este 26 de septiembre de 2009 se cumplen dos años de la detención y desaparición de José Francisco Paredes Ruiz, defensor de derechos humanos y miembro cofundador de la Fundación Diego Lucero AC, organización que trabaja en defensa de los derechos humanos en México, especialmente para el esclarecimiento de los 1,300 casos de desaparición forzada de personas de la llamada Guerra sucia (…)”. El lector Porfirio Barrera Jiménez ordena: “Leí con atención en Utopía ‘Chantaje discursivo’ y me causó mucha sorpresa que no llamas a la mafia que ha secuestrado al país, PAN-PAN, y la escondes Anpri, llámale como es, partidos mafiosos, incluyendo al PRD de los famosos Chuchos, y ya sabemos que el impuesto del 2% es la zanahoria que se tragarán los diputados, el problema es lo que representa todo el paquete fiscal”… Benjamín Flores de la Vega, periodista e integrante del Grupo María Cristina, cumplió un año de fallecido el martes 29.

"CON LOS POBRES DE LA TIERRA"

F.Garaicochea
Palabras con motivo del 25º aniversario del diario La Jornada

Dedico estas palabras a los jornaleros y a los periodistas, que con su entereza y a veces con su vida, han defendido y defienden a la Patria y a la Humanidad. Las dedico también al fundador de La Jornada, Carlos Payán Velver y a la directora Carmen Lira.
Marcuse y otros han definido la izquierda tradicional como integrada por aquéllos que toman partido, en la lucha de clases, por los trabajadores, y en la lucha contra el imperialismo, con los pobres de la tierra.
Las luchas de la izquierda varían según situaciones concretas de dominación y de represión, de acumulación y explotación, de mediación e inmediación violenta. Algunas se dan en el mundo entero. Corresponden, en general, a proyectos por la emancipación humana en que participan los insumisos y rebeldes. Tenerlas presentes ayuda a saber dónde se halla la izquierda en los distintos países, incluido el nuestro.
Aquí sólo quiero apuntar cuatro problemas que en México se plantean a la izquierda: 1 ¿Cuál es la principal atadura o enajenación del país? 2 ¿Qué hechos o actos configuraron a la izquierda? , 3 ¿Qué hacer desde nuestra izquierda formal e informal?, y 4 ¿cómo organizarnos y articulamos desde nuestras distintas posiciones de lucha?
Ni la comprobación de las tesis que sostengo, ni la determinación precisa de los hechos que registro, ni las indicaciones puntuales sobre qué hacer y cómo hacerlo están a mi alcance y menos en el breve tiempo de que dispongo.
La principal atadura o enajenación del país es algo que apenas alcanzamos a ver en forma disgregada...La principal atadura del país es la ocupación de México. No me refiero a la ocupación como un hecho consumado, sino como un proceso actual y que el pueblo de México, como otros pueblos –incluido el de Estados Unidos--se encargarán de echar abajo. Se trata de una ocupación “integral” que los estrategas del Pentágono llaman también “dominación de espectro completo”. Abarca la ocupación=2 0de lo social, de lo político o gubernamental, de lo económico y administrativo, de lo cultural y mediático, de lo territorial y lo ecológico.No se trata de una ocupación de México como la de l847, que Gilberto López y Rivas ha documentado cuidadosamente. Es la ocupación como privatización de todos los cimientos de la soberanía nacional. Combina la intervención “abierta” y “encubierta”, la “convencional” y “no convencional”, las de “efectos directos” y “efectos laterales”, “buscados” y “no buscados”; o supuestamente “no buscados”. Corresponde a un colonialismo o imperialismo postmoderno y financiero. Lo llaman globalización, y tiene redes de dominio en el interior y no sólo en el exterior de los países dominados.
0AEn las últimas décadas México asistió a un proceso cuyos enlaces sirven para atar cabitos. Privatizaciones y desnacionalizaciones de los bienes de la República (Re-pública)) y de la Nación, dieron lugar a una ocupación compartida por compañías extranjeras y mexicanas, y no sólo por empresarios, sino por funcionarios y líderes de la CTM y otros sindicatos oficiales, que forjaron desde entonces un estrecho lazo de poder, intereses y complicidades. Todos ellos vendieron, malbarataron y, también adquirieron, inmensas fortunas mal habidas con las que sellaron el pacto del complejo de poder hoy dominante en México, y que es parte de una red de dominación mundial, en esta región encabezada por Estados Unidos. La ocupación fue bautizada con uno de esos eufemismos en boga: Se le llamó“desincorporación del sector paraestatal”: Como se advierte, la expresión no dice lo que sus beneficiarios no quieren que se diga, y que tampoco les importa si se dice en una especie de cinismo institucional hoy reinante.
Desde los años ochenta del siglo pasado fueron privatizados y desnacionalizados la industria siderúrgica y los bancos, la industria azucarera y sus ingenios, las 12 unidades de que disponíamos para la producción de fertilizantes, los teléfonos de México, los ferrocarriles, los aeropuertos y líneas aéreas, las supercarreteras, las aduanas y más tarde, con los mismos y otros amaños la televisión y el control de los “medios”…y el petróleo, que dejó de ser “nuestro” precisamente en el momento en que representa un valioso “bien no renovable”.
A la confusión de la izquierda mundial añadió “juegos de revoluciones confusas y violentas” en los que “quien manda” es el jugador que mueve, tanto a los “para-militares” como a los “para-revolucionarios”, y con quienes arma un galimatías en que cualquier protesta o rebeldía parece como de locos.
Con simulaciones virtuales y reales, el poder dominante envolvió a la juventud en crueles y desorientadoras batallas. Con sus técnicas de “escenarios en vivo” quitó al movimiento estudiantil-popular el apoyo de buena parte de la población, intimidada y escéptica. Por su lado, a la izquierda, ayuna de ortodoxias y en plena confusión ideológica postmoderna, el Estado le dio la bienvenida. La legalizó con la esperanza de cooptarla y con la seguridad de e nredarla más de lo que ya estaba.
La “ocupación compartida” por oligarquías de yanquis y nativos se concertaría en los pasos a dar. La “iniciativa privada-unida”, la nacional-y-la extranjera “enlazadas”, se regodearon de su inmenso triunfo. Pronto darían nuevos pasos cerrando filas. Así surgiría la primera reforma del Estado oligárquico-tecnocrático--avasallado que haría suyas todas las instituciones y costumbres autoritarias del Estado anterior y crearía otras, más funcionales a sus propósitos.
No todos sus miembros se habían “doblado o vendido” pero todos percibían su escasa o nula fuerza, y en buena proporción se daban a luchar entre sí para ocupar puestos de “representación popular” que significaban jugosas regalías o satisfacían vanas esperanzas.
Como todos los partidos de izquierda del mundo, la izquierda de México vivió y colaboró –con respetables excepciones-- por su autodestrucción ideológica, política, social y moral. Buena parte de ella perdió hasta la dignidad, esa arma de valor excepcional contra la corrupción. Quienes se salvaron de la debacle fueron y son muchos y se encuentran abajo, en medio y arriba de la pirámide social. No sólo son respetables. Son potencialmente más fuertes hoy por su moral de acero y sus nervios de hierro. Pero no logran dominar en los partidos ni cumplir en los gobiernos; ni hacer que sus partidos obedezcan las decisiones mayoritarias de quienes los eligieron, ni impedir que el grueso de sus representantes vote con la derecha leyes y medidas contrarias a los intereses de la nación, contrarias a los trabajadores, a los campesinos, y en general a los marginados, discriminados y super-explotados.
Perdió hasta la posibilidad de conservar la planta industrial de unidades bien conservadas, pues fue obligado a abandonarlas o a dejar que se destruyeran para que las megaempresas trasnacionales vendieran plantas nuevas que no hallaban mercado. El gobierno se vio obligado, o inclinado, a acordar “difericiones” y reducciones de pago de sus ingresos por impuestos, así como a acordar crecientes inversiones en infraestructura que, con cargo al erario público, aumentarían la eficiencia (es decir las ganancias) y disminuirían los costos de las megaempresas. El país entero perdió la capacidad de convertirse en uno de los principales productores de petróleo y derivados del mundo. El gobierno des-estructuró sus institutos de alta tecnología – como el Instituto Nacional del Petróleo que contaba con numerosos ingenieros de nivel mundial a los que privó de recursos y expulsó velada o abiertamente, mientras contrataba expertos y servicios de los monopolios petroleros. Con esas medidas, deliberadamente, asfixió a PEMEX. No conforme con eso, le hizo pagar tasas de impuestos ¡superiores al 50%.de sus ingresos! Desnacionalizó a PEMEX, y lo sigue denacionalizando, entre privatizaciones disfrazadas de contratos de servicios con los grandes monopolios petroleros, y entre cuantiosas y rentables corrupciones de los líderes obrer os con sus grupos de choque.
La pérdida de la autonomía financiera, acompañada del cogobierno que en los hechos impuso el PRIAN --o unión del PRI y del PAN, resulta poco cuando se piensa que algunas de las medidas fundamentales de la privatización, la desnacionalización y la ocupación de la República Mexicana fueron también votadas por la inmensa mayoría de los diputados y senadores del PRD y de la izquierda institucional, hechos que no cabe recordar sólo por explicable resentimiento sino para pensar bien y actuar mejor. En el terreno político, la debacle de la supuesta “transición democrática” empezó cuando el legislativo votó contra los derechos de los pueblos indios, es decir contra el único camino para alcanzar una democracia en un país donde todavía existen y se renuevan las luchas del colonizador y el colonizado.
El “Poli”, “Chapingo”, la Normal, las normales rurales, la “UNAM” y más de treinta universidades públicas sufrieron –y están amenazadas de sufrir aún más-- recortes de presupuesto, mutilaciones de planes de estudio, acosos de grupos de choque, cercos de narco-menudeo, sindicalismo gansteril, en muchos casos, encargado de enseñar con el ejemplo, que la corrupción y “la transa” son el mejor camino del éxito. El neoliberalismo significó también el abandono de la política social y del desarrollo nacional. Generó una cultura del cinismo frente a las acusaciones de robos y peculados gigantescos; un “a mí me vale” frente a las críticas y las protestas fundadas, razonadas, incluso de altos funcionarios oficiales.
Al usar semejantes políticas, alentadas por las fuerzas de un imperialismo que se reserva el derecho de criticar y enjuiciar a sus aliados y subordinados, los gobernantes neoliberales de México, sentaron las bases de un “Estado Fallido” y también las de un “Estado Canalla”. La violación permanente del derecho por el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial, la violación del derecho positivo, del derecho natural, de los derechos humanos y las libertades democráticas, no se diga ya de los derechos sociales; la aplicación del d erecho para legitimar las acciones delictuosas de los amigos y validos y para criminalizar la información y la crítica a través de los “medios”, se convierte en el estilo neoliberal de gobernar de una llamada “Democracia consociativa”, cuyos soberanos del Imperio mañana aplicarán “el garrote” a quienes hoy corrompen con “la zanahoria”, medida que tomarán en México como las han tomado en Irak, en Afganistán, y en muchos otros países, cuando sus socios avasallados y entrenados ya no le sirven para continuar la expansión de su poder y de sus mercados.
Para el Imperio, México da visos crecientes de ser un “Estado Fallido”, y todo indica que en la solución de sus problemas, el gobierno de México opta cada vez más por el uso de la violencia y la violación de los derechos humanos, lo que quiere decir que para pronto también caerá en la categoría que sus padrinos y jueces aplican: la de “Estados Canallas”. Semejantes “concl usiones” de “políticas” supuestamente “no buscadas”, confirman que el Imperio busca hacer de nosotros y de Nuestra América, su “Patio Trasero” y un puente más de la conquista del continente, y de la reconquista de Brasil, Venezuela, Bolivia, Cuba.
El triunfo se logrará si desde los colectivos hasta las vanguardias se impone una moral de lucha que fortalezca la dignidad y el coraje de los pueblos. Moral social y nacional frente a la corrupción del capital, moral de lucha frente a la intimidación del imperio. Sólo el fortalecimiento de la dignidad, de la voluntad y la lucidez en colectivos que no pretendan instrumentar a los demás permitirá defender los intereses de la nación y de los trabajadores. Respetuosos de las políticas en que los colectivos difieran, y a partir de sus distintas posiciones de lucha lograrán la unidad y la fuerza. Pero ésta sólo se preservará para consolidar el triunfo si los pobres de la tierra y quienes están con ellos se organizan en formas autónomas, como hermanos y compañeros a los que se respeta en su dignidad y en sus decisiones emancipadoras.
Si la izquierda quiere encontrar su camino tiene que respetar a los pobres de la tierra. Está obligada a adquirir un compromiso a la vez moral y político y comprobar que cumple en cada uno de sus pasos. No esa hora de recriminaciones, sino de convocatoria a una nación como la mexicana donde la inmensa mayoría de la población es de ciudadanos pobres. Es un llamado a respetar y apoyar otros movimientos emancipadores como el de Cuba, Venezuela, Ecuador, Brasil, Paraguay que tienen el camino abierto para profundizar y extender el poder de sus pueblos cada vez más organizados, educados, informados y creadores.
En la nueva historia participarán pueblos y trabajadores experimentados y entrenados en luchas anteriores por la Patria, la Paz y la Humanidad, por “El socialismo” que será el del siglo XXI e irá más allá del socialismo parlamentario y del socialismo burocrático.
En la nueva historia participarán los cristianos que han vivido la “reconversión” y que irán más allá del paternalismo y de la caridad que no resuelven los problemas de los pobres, que antes humillan su dignidad y hasta los llevan a practicar una humildad enajenada.
En la nueva historia participarán los herederos de Hidalgo y de Bolívar, de Juárez y de Martí, de Flores Magón y de Zapata.
Es necesario comprender que pronto va a sonar el otro grito de la Independencia. Los pueblos y los trabajadores organizados, informados y conscientes, abrirán el camino de la victoria.
¡Viva México!
¡Viva la vida!
¡Viva la jornada que nos espera!

IFAI; OTRA BOFETADA A LA SOCIEDAD

ÁLVARO DELGADO
MÉXICO, D.F., 28 de septiembre (apro).- Es un hecho: La mayoría panista-priista de senadores que ratificó como procurador general de la República a un sujeto identificado como encubridor de criminales, Arturo Chávez Chávez, hará lo mismo con Sigrid Arzt y María Elena Pérez para terminar de derrumbar el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI).
Se trata de una fatalidad no sólo en su significado de inevitable, sino de desgracia social: El IFAI nació, en 2003, como resultado de una exigencia ciudadana de crear mecanismos para la rendición de cuentas mediante el acceso a la información en poder del gobierno federal, que la había conculcado hasta entonces.
Pero ya desde que se discutía la creación del IFAI en el 2002, en el marco de la confección de la Ley Federal de Acceso a la Información Pública Gubernamental, se identificó a uno de los principales opositores a la apertura informativa: El coordinador de los diputados federales del PAN, que era nada menos que Felipe Calderón.
La labor de zapa que ha hecho Calderón en el IFAI está documentada desde entonces --y publicada en Proceso--, y ahora se corona con sus propuestas al Senado para reemplazar a Alonso Gómez-Robledo Verduzco y Juan Pablo Guerrero Amparán, este último sin duda el más consistente comisionado para garantizar el derecho de los mexicanos a saber.
No extraña que Calderón envíe al IFAI a Arzt y a Pérez, ambas de trayectoria y desempeño opuesto a la transparencia y a la rendición de cuentas, cualidades que deberían ser inobjetables para quienes deben ser custodios de la garantía constitucional --¡constitucional!-- a saber.
Arzt encaja en la propagandística obsesión oficial de la "guerra" contra el crimen organizado: Secretaria técnica del Consejo de Seguridad Nacional, de la que fue despedida por inepta, era la única de la alta burocracia de ese ámbito que prohibió que se hiciera pública su fotografía, porque temía por su seguridad.
Más que la anécdota en sí, lo que se revela es la proclividad de esa mujer al ocultamiento de información en ese ámbito, entre ella los abusos y violaciones a los derechos humanos de la Policía Federal y el Ejército, algo que el propio Calderón ha tratado de ocultar a través del IFAI, cuyo único comisionado que se oponía era Guerrero Amparán.En marzo de este año, en este espacio me ocupé de este afán de Calderón, quien, con la engañifa de la seguridad nacional, envió al Congreso una iniciativa de reforma legal para que jamás se pueda conocer el contenido de las averiguaciones previas, aun cuando ya estén cerradas.
Tal y como lo denunció públicamente el comisionado Guerrero, el gobierno de Calderón impone una política de cerrazón semejante a la de George W. Bush en Estados Unidos, a raíz del ataque terrorista del 11 de septiembre de 2001:"¿Qué ganó Bush con eso? Nada sustancial. La cerrazón no fortaleció sus esquemas de seguridad. Prueba de ello es que su sucesor, Barack Obama, decidió abrir los archivos en cuanto entró a la Casa Blanca. La transparencia no merma la seguridad nacional."
Pero la cerrazón de Calderón puede acreditarse también cuantitativamente: El rechazo a solicitudes de información se ha disparado: En 2007, su primer año de gestión, 4 mil 222 solicitudes ciudadanas no tuvieron respuesta, pero para el 2008 la cifra se duplicó: 8 mil 208.
Por eso Calderón propone, también como comisionada, a María Elena Pérez Zermeño, una mujer harto conocida en el mundillo priista como publirrelacionista y que, repentinamente, se transformó en experta en acceso a la información y en combativa activista en defensa de este derecho.
Allegada a Elba Esther Gordillo y a sus amanuenses en la prensa, a menudo afines a Calderón, Pérez engatusó a Ernesto Villanueva, uno de los autores de la Ley Federal de Transparencia, para que se volviera su impulsor a la Comisión de Transparencia del Distrito Federal, y lo logró.
Astuta, se volvió heroína del PAN y de toda la derecha al enfrentarse con Andrés Manuel López Obrador, no en una defensa auténtica del derecho de los capitalinos a someter a escrutinio a su gobierno, sino en realidad a defender sus jugosos emolumentos de que disfrutó como comisionada ciudadana, cargo que ostentó hasta julio de este año.
Pero esta mujer ni siquiera se llama como dice llamarse: Se presenta como María Elena Pérez-Jaen Zermeño --así ha cobrado como alta burócrata en el Distrito Federal y así se propone hacerlo en el IFAI--, pero en realidad se llama María Elena Pérez Zermeño.Fue la revista que dirige Villanueva, Transparencia y Corrupción, la que exhibió el nombre de paja de Pérez, quien por ello inclusive enfrenta, en el ámbito penal, una denuncia por la probable comisión de los delitos de colusión de servidores públicos, uso indebido de documentación oficial y usurpación de funciones, y en el ámbito administrativo se cuestiona su probidad y honradez.
Para sostener que se llama como dice llamarse, Pérez no exhibe la constancia de un juicio para cambiar su nombre, sino sólo un acta notarial de uno de sus afectos, el exprocurador Ignacio Morales Lechuga.
Arzt, quien se inscribe netamente en la facción de Calderón, cuenta con todo el apoyo de los senadores del PAN, y Pérez, más bien de establo priista, es muy amiga de Manlio Fabio Beltrones, coordinador priista.
Así, en el dando y dando de la mercadería política, la expresión más grotesca de la involución en curso, las dos quedarán firmes al no ser objetadas en el plazo de un mes y, en un caso semejante al de Chávez Chávez, se dará cumplimiento al adagio de que a los santos los santifican, a los beatos los santifican y a las ratas las ratifican…
Apuntes
En este espacio se anticipó que Demetrio Sodi y Carlos Orvañanos quedarían impunes y se quedarían con las delegaciones Miguel Hidalgo y Cuajimalpa. No se requiere ser pitoniso, sino sólo tener sentido común y apreciar lo evidente: La corrupción inaudita de instituciones como el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), cuyos magistrados de la Sala Superior prefirieron no sumar otra raya al tigre y dejaron el trabajo sucio a los de la Sala Regional. Pero se sentó un precedente terrible con la resolución de Sodi: Al no contabilizarse como propaganda la "entrevista" transmitida durante el partido de futbol Puebla-Pumas, el 23 de mayo –con lo cual no se rebasa el tope de campaña--, el TEPJF abrió la puerta para que partidos y candidatos gasten lo que sea sin posibilidad de sanción… Por cierto, Sodi fue uno de los más feroces detractores de la construcción de los segundos pisos del Periférico en la Ciudad de México, y hoy guarda silencio ante la obra análoga en el Estado de México, como lo hace también la jauría que imitó a este saltibanqui que no tarda en irse al Partido Verde. Está en su naturaleza...Comentarios: delgado@proceso.com.mx