Isabel Ortega | Cyntia Moncada
Saltillo, Coah.- Un aire diferente se respira en el centro de la ciudad pues durante cuatro días todo será posible, desde ver televisión en la Plaza de Armas o toparnos con un árbol que se mueve, hasta una sorpresiva lluvia de botellas en plena calle Juárez.
Los artistas ya tomaron la ciudad y han llevado sus creaciones a bares, calles y callejón de la ciudad durante el segundo Festival Santos Rojo de Arte Arriesgado.
Las actividades iniciaron el miércoles, en un evento de inauguración que tuvo lugar en la sede del festival, el Callejón Santos Rojo, con la presencia de los artesanos de “Desierto Oficio” y una pequeña muestra fotográfica.
Diferentes puestos llenaron el callejón, desde caballitos de madera, juguetes, conservas y licores, hasta artesanía urbana alternativa como accesorios, marionetas y llantas convertidas en exóticos muebles.
Muestra fotógráfica
John Sevigny presentó “El Muerto Pare el Santo” a las 18:00 horas en la Forchetta. La muestra aborda el íntimo vínculo que existe entre la vida de los hombres y la muerte, la conexión que existe entre ellos a través de la existencia del ser humano. Aunque las fotografías presentan simbolismos cristianos, no es una exposición con tintes religiosos, en cada imagen se elimina todo menos lo esencial, lo que le permite al autor retratar estas conexiones.
Kikapoos en el rincón
El Rincón Mexicano fue la sede de la muestra plástica de Felipe Uresti, “Kikapoo”, que consiste en una serie de nueve pinturas donde plasman a la tribu en un equilibrado juego de formas simétricas y colores, con una paleta en rojos, amarillos y negros principalmente. Las piezas fueron realizadas en material degradable para cooperar con el medio ambiente.
Muestra Plástica por tres
Gabriel Bazaldúa, Gerardo Canales y Natalia Alejandrina Blanco expusieron en el bar “Krakovia” 15 piezas entre las que se encontraban esculturas y pinturas con diferentes temáticas: la visión de un niño respecto a la espiritualidad, dios, la tristeza, la amistad y los juegos; la representación de lo bello, lo tétrico y lo siniestro; el amor y los recuerdos del pasado.
Quítate la máscara
Bajo el vuelo de mosquitos plásticos las “Máscaras del Mundo” se exhibieron en Casa Tiyahui, una exposición realizada por David Árias. “Máscara del Inocente Asustado” y “Máscara del Jaguar Sediento”, son algunas de sus obras que fueron hechas con acrílico sobre fibra vegetal.
Estrenan galería
El restaurante bar La Chimenea se unió al proyecto de convertir bares en galerías, condición que se quedará de manera fija en el establecimiento, con una exposición de alumnos de la Escuela de Artes Plásticas Rubén Herrera.
Carlos Bustos, Ruby Sandoval, Guillermo Ramírez, Argelia Charles, Swami Rodríguez, Guillermo de León y María Elena García participaron en esta muestra en la que predomina la técnica mixta y en la que destaca la reproducción de las líneas y expresiones del cuerpo humano en contraste con líneas, figuras geométricas y elementos de la naturaleza.
La otra realidad
La última inauguración de la noche fue “Plan B” de Alina Poulain, una exposición que salta a la vista por la vivacidad de su técnica y su temática moderna. Para la autora su exposición tiene que ver sobre todo con recuerdos: una canción de Edith Piaf, un libro o un asalto, por mencionar
algunos.
Poulain divide su exposición en la vida “on line” y “of line”, en la primera refleja esa “otra realidad” que se vive en el ciber espacio y la otra tiene que ver con lo cotidiano.
Las actividades del miércoles concluyeron con “Colores y Sensaciones”, una muestra que llevó al espectador a experimentar sensaciones y atmosferas a través de la mezcla de música e imágenes.
Cada evento tiene algo valioso que ofrecer y lo espera en el centro histórico.
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