Marchan en Saltillo por sus utilidades

Un grupo de 60 ex trabajadores de Torres Mexicanas se plantaron hoy en Palacio de Gobierno para pedir la ayuda del Gobierno del Estado en la resolución de su caso, en el que aseguran que la empresa les debe casi 29 millones de pesos de utilidades entre 2000 y 2004.

Los ex empleados, todos provenientes de Monclova, iniciaron su protesta en los límites de Saltillo y Ramos Arizpe, desde donde caminaron hasta la sede gubernamental para manifestar su inconformidad por el adeudo de utilidades que mantiene Tomexa con 250 ex trabajadores.

A su paso, los inconformes generaron caos vial, pues parte de su trayecto lo hicieron en plena hora de salida de los planteles escolares.

En 2004, los obreros de dicha empresa estallaron en huelga, la que levantaron el 28 de mayo del 2005, al aceptar una oferta de liquidación de 27 millones de pesos. Sin embargo, posteriormente, los abogados de los trabajadores exigieron el pago de utilidades, que se calcula son entre 28 y 29 millones de pesos.

Jorge Jiménez Zúñiga, ex obrero de la compañía, dijo que los ex trabajadores se sienten engañados y cansados de que los traigan de un sitio a otro. “Ahorita ya nada más confiamos en el Gobernador (Humberto Moreira), ya todos nos dieron puras vueltas y mentiras”, recalcó. “No nos vamos a ir hasta que hablemos con él, no más con él vamos a hablar, con otros que ni se arrimen”, advirtió.

Jiménez Zúñiga dijo que son alrededor de 250 personas las que están exigiendo el pago de sus utilidades y a las que les toca en promedio poco más de 100 mil pesos. “Queremos que nos resuelvan este problema, que nos paguen el dinero que nos deben, no les pedimos nada más son entre 28 y 29 millones de pesos por los cuatro años de utilidades y aquí estamos y no nos vamos a ir”, insistió.

“La vez pasada dijeron que nos fuéramos y que nos iban a resolver el problema en 10 días y ahora no, si no nos resuelven el problema no nos vamos a ir”, subrayó. Mencionó que actualmente muchos de los ex trabajadores permanecen desempleados y que están subsistiendo “a como Dio no da a entender”.

“Ahorita no hemos almorzado todavía y aquí andamos, la mayoría aún estamos desempleados, pero queremos nuestro dinero”.