Miles de trabajadores electricistas y de otros sindicatos, así como campesinos y ciudadanos en general desplegaron amplia y variada jornada de resistencia civil pacífica en la ciudad de México y a lo largo y ancho de la República / Mítines, bloqueos, protestas ante las dos grandes televisoras, así como multitudinaria marcha que culminó en el Zócalo capitalino / No más sumisión ni desesperanza, reclama el Sindicato de trabajadores de la UNAM / Los campesinos proclaman “¡Ya estamos hasta la madre!”
MÉXICO, D.F. 11 de noviembre (LILIA ARELLANO).-Todo el peso y la fuerza del Estado, un total autoritarismo, la estrategia mediática cargada de crítica, de estigmas, de denuncias sobre actos violentos, sobre ilícitos, con un tratamiento muy alejado del que se les brinda incluso a los más altos miembros de la delincuencia organizada, fue la respuesta que el gobierno federal otorgó a los miles de trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas, a otros que se unieron a esta protesta para poder elevar las suyas propias y que también pertenecen a organizaciones sindicales, pero también fue la interpretación a la promesa de diálogo permanente y de atención a las demandas ciudadanas que los calderonistas ofrecieron a la sociedad civil que juntó sus voces en un claro ¡ya basta! a los abusos que cometen las autoridades contra la población.
Las dos grandes cadenas televisoras se llamaron, desde las 7 de la mañana de este miércoles que sin duda marca el arranque de decisiones que habrán de tomarse en el futuro más próximo, agredidas porque los electricistas ante el manipuleo informativo del que han hecho gala junto con otros medios de comunicación impresos al servicio del gobierno en turno, hicieron pintas en sus unidades cruzando una equis y a gritos argumentaban que los “violentos, agresivos, camorreros sindicalistas estaban atacando ¡la libertad de expresión!, argumento falso puesto que en ningún momento intentaron manipular sus señales, o retirarles el micrófono, fue su actitud la protesta ante una información que en cadena se ha brindado plena de falsedades, de mentiras, de calificativos a una lucha que tiene que ver con el país en su conjunto y no con la serie de intereses que, junto con el gobierno del michoacano, representan y en los que participan.
Citaron a las siete de la mañana y lo que el gobierno, incapacitado como está para poner en marcha cualquier tipo de operación que no lleve la etiqueta de “golpe de estado” como el brindado a las instalaciones de Luz y Fuerza o aplastante en contra de los ciudadanos, pusieron en marcha toda una estrategia que les resultó exitosa y altamente representativa del colmo al que han llevado a los ciudadanos. A esa hora y en grupos relativamente pequeños, formaron toda una glorieta en uno de los principales cruces de la ciudad capital; lo mismo hicieron en otras avenidas principales y con contingentes menores. Así también, se impusieron en las entradas y salidas de las carreteras. En tanto otros cumplían su cita en el edificio central del sindicato y otros más empezaban a llenar los puntos de arranque de la manifestación que culminó en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México.
ES SOLO EL PRINCIPIO
Será esta fecha, 11 de noviembre, sin duda otro parteaguas en la historia del México de nuestros días. Agustín Rodríguez, líder del STUNAM, sostuvo en su participación que la huelga nacional es la única herramienta para cambiar al país. Al instante se escucharon miles de voces gritar ¡huelga, huelga, huelga, huelga, huelga, huelga! El clero católico también participó en este acto. Martín Hernández, representante de la Diócesis de Saltillo, afirmó que la Iglesia respalda la resistencia del SME por tratarse de una lucha justa. “Una Iglesia que permanece sorda y muda ante el grito de los trabajadores, es una Iglesia cómplice de los poderosos que pretenden mantenernos en la sumisión y la desesperanza”.
Los del STUNAM se unieron sin cortapisas a la propuesta de una huelga nacional. Sostuvo Rodríguez que las deficiencias en Luz y Fuerza del Centro no son culpa de los trabajadores sino de quienes han administrado esa empresas y por quienes han gobernado al país en los últimos 30 años, mismos que han demostrado a cabalidad su incapacidad para generar energía y crear empleos. Por su parte Manuel Castillo, de la Central Campesina Cardenista, expresó el apoyo de hombres y mujeres del campo del país que se manifestaron este miércoles en varias Entidades ya que, dijo, “están hasta la madre de las acciones del gobierno”.
Francisco Hernández Juárez, líder de los telefonistas, refrendó el apoyo de su organización al SME, la cual, dijo, mantendrán hasta sus últimas consecuencias. Denunció que hay toda una embestida del gobierno contra el sindicalismo en México, por lo que resaltó la necesidad de lograr una gran unidad de todos los trabajadores del país. Se refirió muy claramente a la falta colectiva que realizaron hoy los telefonistas y a la movilización que hicieron frente a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes desde donde, habrá que recordar, se fijan las bases para las licitaciones que, a decir verdad ya tienen pactadas de antemano, para la participación de empresas privadas en el uso de los miles de kilómetros de fibra óptica, mismas que tienen como vértice común la participación en la compañía beneficiada propiedad de dos ex secretarios de Energía igualmente panistas, como Calderón, e igualmente cómplices de los grandes despojos.
Los telefonistas pidieron la modificación del titulo de concesión a Telmex que permita la inmediata incursión de la empresa al “triple play”, esto es a los servicios derivados de la convergencia tecnológica que implica ofrecer servicios de telefonía, video y banda ancha.
“No más favores al capital español. Triple play para Telmex” era el texto de una de las mantas exhibidas afuera de la SCT. Micrófono en mano, el secretario de política exterior del STRM recordó que durante el mandato foxista, Gil Díaz otorgó créditos blandos para la instalación de fibra óptica que hoy está licitando la actual administración, en la que empresas como Telefónica española están interesadas. Fue entonces cuando surgió otra manta en la que se leía: “Horcasitas, veo veo, queremos el video”.
MOMENTOS DE DEFINICION
A Martín Esparza, líder máximo del SME, se le vio nervioso. Las botellas de agua se las bebía sin freno. La boca estaba permanentemente seca, las mandíbulas contraídas, la mirada siempre pendiente, había angustia en el rostro y no era para menos. Por un lado estaba y así aparecía eventualmente satisfecho al observar cómo por centenas, por miles, iban llenando la plancha del Zócalo los miembros de su sindicato, los de otras organizaciones y una cifra más nada despreciable de ciudadanos que lucían pancartas haciendo patente su apoyo y otros señalando “Estoy con el SME, pero ya me cansé de ser tu pendejo, Calderón”. Otra más se refería “Alto a los abusos, ya se me quitó lo pendejo”. “No soy borrego, no tengo lana, sólo tengo hambre”. Y muchos más que sólo referían mentadas de madre al gobierno federal y a su principal representante.
Todo eso parecía pretender dominar y grabar en su mente Martín Esparza, quien poca o tal vez mucha, o a lo mejor ni siquiera alcanzaba a escuchar lo que se acercaban permanentemente a reportarle. Sus temores, lo expresó posteriormente a los cercanos, radicaban en acciones de prepotencia, de agresión de los federales contra los manifestantes y que acabara esa magna concentración en un campo con heridos y muertos, y la culpa la echarían total, plena, cargada a los electricistas, logrando por otra parte resucitar el temor de los ciudadanos en participar en cualquier marcha o concentración o tal vez despertando abruptamente a ese México bronco que algunos ya daban por muerto.
Fueron horas, muchas horas en las cuales la tensión iba creciendo. Esparza se hizo acompañar de diputados federales. Sus principales apoyos se concentraron en los del Partido del Trabajo. Estuvo permanentemente “custodiado” por Gerardo Fernández Noroña y por Jaime Cárdenas. Se le unieron muy rápidamente Manuel Barttlet, Alejandro Encinas, Bertha Luján y Ricardo Ruiz. Antes de que encabezaran la gran marcha, Esparza y miembros del SME entregaron miles de volantes a los automovilistas y transeúntes, en los que se explica muy claramente la situación actual por la que atraviesa Luz y Fuerza y las agresiones cometidas contra los trabajadores. Al término de la etapa de volanteo, el líder sindical señaló que no caerán en la trampa del gobierno para que cedan sus empleos.
“Si ellos sacaron de Marina Nacional y Melchor Ocampo así como de todas las oficinas alternas a los trabajadores, a nuestros trabajadores, ellos tendrán que venir a trabajar en la CFE y así vamos a estar todos los días, hasta que nos entreguen nuestras instalaciones, saquen a la Policía Federal y respeten al SME”, dijo.
ESTRATEGIA MEDIATICA FRACASADA
Incapaces y perversos como son, los funcionarios calderonistas suman este día otra derrota más a su larga fila de registros de esta naturaleza. Como por fortuna ya existen los videos y dentro del Sindicato sí se escucha a los asesores, se optó por grabaciones de todo tipo, “con celulares si no hay de otra”, de esta forma pudieron demostrar que el supuesto “atropellamiento múltiple” del que se pretende culpar a miembros del SME se debió a que los policía federales dispararon sus armas “al aire”. Los electricistas se encontraban bloqueando la autopista a la altura de Tepotzotlán, en el Estado de México, cuando hasta ese lugar llegaron 150 agentes armados hasta los dientes y protegidos por un helicóptero de las fuerzas federales.
La versión y filmación advierte que los uniformados dispararon sus armas, después de un supuesto diálogo en el cual prevalecieron amenazas de todo tipo por parte de las autoridades, por lo que la reacción de protección fue lanzar un Chevy rojo contra ellos. Dicen los policías que sus disparos fueron para lograr que “los manifestantes se dispersaran”. Sin embargo, desde las oficinas centrales de la PFP, la versión “oficial” asevera que los manifestantes fueron los que dispararon pistolas cuando no había uno solo de ellos al que le pudieran comprobar la posesión de un arma y menos aún podría dar positivo a las pruebas que se aplican en las manos para detectar si hubo disparos.
Pese a sus grandes esfuerzos y ordenes giradas en todos los tonos, resultó imposible detener la información que brotaba por doquier. En Puebla, el Estado de México, Morelos e Hidalgo y Guerrero hubo manifestaciones y marchas de apoyo al SME. Como se informó, las carreteras a estas Entidades fueron bloqueadas. La estrategia minimizando la magnitud a la que han llegado las inconformidades ciudadanas encabezadas ahora por el SME, no le resultó al gobierno federal en ninguno de sus órdenes.
El que logró ponerse una estrellita, en medio de esta manifestación que los medios al servicio del gobierno pronosticaron sería caótica, de grandes daños para la economía y el comercio y de afectaciones de todo tipo a los ciudadanos, fue Marcelo Ebrard, el jefe de gobierno capitalino, quien logró no solamente evitar caos viales, molestias, etcétera, sino que hubo un total control y seguridad –hasta donde puede brindarse tomando en cuenta que se tiene como enemigo número uno a otra policía, ésta federal, con todas las instrucciones de provocar y agredir- para los manifestantes durante su recorrido y en su estancia en el Zócalo.
LA OTRA CARA
DE LA MONEDA
Mientras las calles y principales avenidas de la capital iban llenándose de ciudadanos inconformes de prácticamente todas las acciones emprendidas por los gobiernos panistas y de las violaciones a la Ley que parecen ser la permanente durante el mandato de Calderón, los magistrados de la Suprema Corte, esos ancianos que no tienen un solo pelo de venerables, les propinaban “palazo” a los del SME al rechazar la demanda interpuesta por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Desecharon, sin miramiento alguno y con una total frigidez y sordera a los reclamos públicos, los argumentos presentados contra el decreto del michoacano, mediante el cual extingue a Luz y Fuerza del Centro.
Dejaron viva la solicitud de Martín Esparza para investigar violaciones graves a las garantías de los trabajadores y pretendiendo lavarse las manos, dejaron abierta la posibilidad de que tanto senadores como diputados puedan promover una demanda contra el Decreto. Situación esta última que se ve en extremo difícil, ya que en esas “pandillas” la complicidad es auténtica y fueron esos grupos, los mayoritarios con apoyo de los satélites y lo que han dejado como remedo de izquierda (PRD), los que les otorgaron manga ancha a Televisa y TV Azteca con el triple play y el gobierno federal está más que comprometido con ambas cadenas al resultar sus voceros en la campaña emprendida contra el SME y, como la “tremenda corte” está a las órdenes del inquilino provisional de Los Pinos –como nunca antes—, pues ya nada más puede interpretarse tal sugerencia de que sean los legisladores los promotores de una nueva demanda, como una estúpida salida a manera de no quedar como únicos culpables de todos los latrocinios y violaciones legales que van registrando a su paso por ese lugar que, por fortuna, ya es su última parada, la que sigue es la muerte.
Pero también los de la toga validaron el impuesto a la gasolina y al diesel, y nos lo van a presentar como un “golpe a los gasolineros”, cuando en realidad lo asestan sobre un 75 por ciento de mexicanos que son quienes pagarán ese gravamen a través de la cadena de incrementos que surgirán en todos los productos y decir en todos es, en verdad, en todos. Un 25 por ciento no resentirá nada de nada. Y esta vez no se trata de los poderosos, de los que en verdad son los que se roban la energía eléctrica, ya que reconocer que por ese rubro dejan de recibirse 18 mil millones de pesos, es claro que no se trata de “diablitos” de los ambulantes o de quienes están colgados porque necesitan un foco, sino por las grandes empresas, por las mismas que sólo pagan el 1.7 por ciento de impuestos, sino de los de la otra clase, de los que no tienen un mendrugo de pan que llevarse a la boca.
En esa otra cara de la moneda está la revelación de Calderón sobre la supuesta intentona de trabajadores del SME de boicotear el servicio eléctrico, de provocar apagones y que nada de esto fructificó porque los de la CFE son unos buenazos, tanto así que hasta distinguió a su director como “Ingeniero del Año”. Así, en medio de una gran revuelta, Calderón pretende permanecer inamovible y participa en un acto en el que premia al principal causante de los grandes problemas que ahora hacen crisis y que le están estallando en pleno rostro. Elías Ayub recibió la premiación con agrado, pero en los gestos se notó que sabía que ni era el momento y que tampoco se merece nada que no sean más y más billetes producto de sus sesudas y muy productivas relaciones y ventas.
Esta acusación sobre las pretensiones de los electricistas es tan falsa como las supuestas amenazas contra su vida procedentes de los narcos y de la delincuencia organizada. Y es que no pueden ni unos ni otros ir en su contra o pretender que algo le pase, ya que si alguien se ha visto altamente beneficiado en el desarrollo de sus actividades son ellos y han logrado que los propios funcionarios calderonistas les hagan reconocimientos públicos. Ahí está el hecho por el ex subsecretario de SAGARPA quien elogió el éxito de la comercialización, distribución y ventas de los narcotraficantes, estrategias y proyectos que sostuvo, tienen que ser ejemplo para lograr el éxito en el campo.
O tal vez sea mejor mencionar a Luis Cárdenas Palomino, coordinador general de inteligencia para la prevención del delito de la PFP, quien también reconoció que los grupos delincuenciales le ofrecen una dignidad que la sociedad y las autoridades no hacen. “Les han ofrecido trabajo y oportunidades y un sentido de identidad que la sociedad no les ha podido dar; les han ofrecido una dignidad que nosotros al bolero, a la gente, tampoco se las dimos; les han ofrecido algo que es lo más delicado: la oportunidad de una revancha social que es verdaderamente algo grave”. A este paso terminaremos votando por Joaquín “El Chapo” Guzmán, esperando que su brazo financiero sea el titular en Hacienda, ya que el reconocido capo de capos ha logrado ubicarlo como uno de los hombres más poderosos del mundo, por encima incluso de Hugo Chávez y otros líderes más, obviamente dentro de una lista en la que ni figura ni figurará don Felipe; o tal vez, cuando por fin sepamos a cuánto asciende su fortuna personal, la lograda en 6 años.
Y ya en abierta desesperación el camorrero titular de la Secretaría del Trabajo, Javier Lozano, terminó el catálogo de pruebas al que deberán someterse los empleados de LyFC que aceptaron liquidación y que, supuestamente, serán recontratados. Como se corrió la voz de lo “duro” de los exámenes, razón por la cual estaban empezando a no aceptar lo que ya habían firmado pero por lo que todavía no les daban un céntimo, las huestes de Lozano de inmediato les ofrecieron una etapa de capacitación para que puedan pasar el examen y además, les pagarán ese tiempo que suponen será de tres meses con apoyos hasta por 16 mil pesos.
El líder del PRD llama a Calderón a la reflexión y al diálogo y así, desperdicia esa gran oportunidad de la izquierda de representar auténticamente —y como lo señalan sus principios ideológicos— a quienes conforman la clase trabajadora, a la fuerza de los ciudadanos al exigir el cumplimiento de sus derechos y la exigencia de que se cumplan todos los renglones inscritos en nuestra Carta Magna y que hablan de las garantías individuales.
En fin, mientras las calles lucían pletóricas de ciudadanos inconformes, la bolsa registró una importante alza. Ese es nuestro México ¡si señor!
Lilia_arellano@yahoo.com
www.fuegocruzado.tv
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jueves, 12 de noviembre de 2009
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